La construcción paulatina de una gran base de información de predios en Colombia comenzó en el año 2015, a partir de la Ley 1753 del mismo año. Este proceso ha necesitado varias administraciones y legislación consecutiva, que paso a paso ha cimentado la construcción de un mecanismo con una mirada del siglo 21, a un problema que padece Colombia desde el siglo 19. 

En los primeros años de la construcción del catastro en Colombia se decidió la separación en dos ámbitos de la información de un predio: por un lado, lo técnico informativo y por otro lado lo económico. Esta disparidad trajo como consecuencia que el manejo de esta información estuviera a cargo de varias entidades, las cuales no siempre compartían la información, dificultándole al ciudadano la consecución de la información misma. Al mismo tiempo las mejoras tecnológicas en el procesamiento de dicha información no iban a la par con las nuevas características del mercado, que protegían en mayor medida al custodio de la información, pero que dejaban relegado al ciudadano en el último peldaño de la cadena de valor del dato catastral. 

A comienzos de la década de los 2000 inició un proceso que privilegia el uso de las tecnologías más avanzadas en la construcción, procesamiento y transferencia de los datos catastrales, y al mismo tiempo, hace que sea el ciudadano propietario o usuario, quien esté en el centro de toda la cadena de producción del dato.  

El SINIC en el centro de la información catastral 

El Sistema Nacional de Información Catastral – SINIC, aún se encuentra en su fase inicial de diseño, definida a partir de la Ley 1955 de 2019. Es por esta razón que fue necesario contar con un sistema auxiliar que realice el proceso de captura y gestión del dato catastral de forma temporal, de manera que el Estado colombiano pueda garantizar que los procesos continúen mientras se oficializa la primera, en un ambiente productivo del SINIC. 

El sistema transitorio del SINIC permite consolidar una gran base de datos catastral del país a partir de los datos recopilados por los gestores catastrales. Esta figura, introducida en la legislación colombiana en el Decreto 1983 de 2019, traslada a los particulares y otras entidades públicas algunas de las funciones que antes desarrollaba el IGAC, entre las que se encuentra la conformación de la base de información de los predios de su jurisdicción.  

Estos datos son administrados de forma natural por los gestores catastrales, pero se requiere que exista un mecanismo centralizador de la información, que permita conocer de forma unificada las dinámicas prediales del país. Es ahí donde el IGAC juega un rol principal al constituirse como administrador del SINIC y con la responsabilidad de la recepción, almacenamiento y extracción de la información de este gran sistema. 

Inicio de la transferencia de datos catastrales 

A partir de marzo de 2022 se inició la transferencia de la información en manos de los gestores catastrales hacia el IGAC. Este proceso fue reglamentado mediante la resolución 315 de 2022 en la cual se definen entre otros aspectos, los mecanismos informáticos y los detalles de dicha transferencia. 

Uno de los aspectos más importantes es el relacionado con el formato de intercambio de información, el cual fue definido a partir del formato de intercambio de Interlis (mejor conocido por su extensión: XTF). Este formato articula la transferencia de la información con la construcción de unos modelos de datos que estén más acordes con las nuevas dinámicas y flujos de información.  

El SINIC cuenta con la capacidad de contener no solo los datos de texto (alfanuméricos) de cada uno de los predios del país, sino también con el elemento relacionado con la localización y distribución de los predios de forma espacializada. Este elemento espacial permitirá realizar nuevos análisis y seguimiento de la distribución predial, así como su impacto en lo administrativo y geográfico del territorio. 

Próximas etapas del SINIC 

El SINIC se encuentra actualmente en un proceso de desarrollo mediante la constitución de una fábrica de software que tiene por objetivo cubrir todos los detalles del ciclo de vida del sistema hasta su implementación. Este es solo un primer avance que permite desarrollar de forma paralela la construcción del producto que finalmente se convertirá en la base de datos más grande de información catastral de Colombia.  

Este gran esfuerzo se suma a múltiples iniciativas gubernamentales que se orientan a un reconocimiento del territorio como eje fundamental de las políticas sociales y económicas del estado colombiano. El SINIC jugará un rol clave para responder de una forma más dinámica y detallada a las preguntas que tenemos sobre el uso y aprovechamiento de las potencialidades del territorio y de la apropiación que como ciudadanos hacemos del mismo.  

El SINIC se constituirá en el eje articulador de la información del territorio con información cada vez más detallada, lo que nos permitirá conocer y explorar de una mejor cada uno de los recursos con los que contamos en el país.